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viernes, 28 de marzo de 2014

Capítulo 3º de “Txarliboda en el Clan de los Txarlines”..... LA MANO NEGRA DE TXARLI PRIETO EN LAS FUNDACIONES SOCIALISTAS........................................ Si Mario Onaindía y Ramón Rubial levantaran la cabeza…

Fernando Buesa.
ETA ha asesinado a más de 800 personas en 50 años de terror. 829, según la Fundación de Víctimas del Terrorismo. 858, según el periódico “El Correo”. Al menos 41 asesinados eran políticos. Fue a mediados de los años 90 cuando ETA decidió poner en el centro de su diana criminal a concejales, parlamentarios o dirigentes políticos. De ellos, 12 eran del PP, 2 de UPN y 9 del PSOE. Dentro de las filas socialistas, tras el asesinato del senador Enrique Casas en 1984, ETA mató entre 2000 y 2008 a Fernando Múgica, Fernando Buesa, Juan María Jáuregui, Ernest Lluch, Juan Priede, Froilán Elespe, Joseba Pagazaurtundua e Isaías Carrasco. En memoria de las víctimas del terrorismo surgieron Fundaciones.
"Generales" de la Fundación Popular de Estudios Vascos.
Algunas eran genéricas (Fundación de Víctimas del Terrorismo) y otras llevaban nombres de políticos asesinados por ETA: la Fundación Gregorio Ordóñez o la Fundación Fernando Buesa...
    PACTO TRIPARTITO DE PESEBRES
     Ante la proliferación de Fundaciones vinculadas con partidos, éstos alcanzaron en 2007 un acuerdo en Euskadi para que cada formación política eligiera una sola entidad que pudiera ser subvencionada con dinero público. El PNV no tuvo dudas: la destinataria de fondos sería la Fundación Sabino Arana. El PP enriquecería las arcas de la Fundación Popular de Estudios Vascos. El PSOE decidió que se apoyase a la Fundación Ramón Rubial, el histórico dirigente socialista vasco que estuvo encarcelado casi 20 años en prisiones franquistas y falleció de
http://euskizofrenia.blogspot.com.es/2009/09/estatuas-de-lehendakaris.html
muerte natural en 1999 a los 92 años de edad.
     Aquella decisión podría haber dejado sin subvenciones públicas a la Fundación Fernando Buesa y a la Fundación Mario Onaindía. A partir de aquel momento, deberían sufragarse con aportaciones de empresas y particulares. Sin embargo, los cambalaches y cambios de cromos que acuerdan los partidos para apoyarse en distintas instituciones suelen incluir en su letra pequeña subvenciones a todo tipo de asociaciones: también a las fundaciones. En el Boletín Oficial del Territorio Histórico de Álava del 20 de febrero de 2012 se reflejan las subvenciones cosechadas por el PSE de Txarli Prieto para “sus” fundaciones:
-        100.000 euros para la Fundación Fernando Buesa para subvencionar sus actividades de 2012.
-        40.000 euros para la financiar el programa de actividades de la Fundación Ramón Rubial.
-        Y 15.000 euros para la Fundación Mario Onaindía cuya finalidad es “Colaboración en Proyecto Intelectual y Político 2012”.
TXARLI PRIETO, EL “CONSEGUIDOR”.
Txarli Prieto se apuntó entonces una medalla ante los suyos como el conseguidor de 155.000 euros de dinero público para alimentar “sus” tres fundaciones socialistas. Sin embargo, las relaciones de Prieto con las familias de Fernando Buesa y Mario Onaindía no son modélicas. El líder de los socialistas alaveses cree tener derecho de pernada en dichas fundaciones hasta tal punto que, hace un año, en el Congreso del PSE de Álava en el que fue reelegido secretario general, Txarli presionó a cuatro empleados de la Fundación Fernando Buesa encuadrados en el sector crítico para que se pasasen a su bando. Uno a uno, Prieto les convocó en un despachito que se instaló en el Hotel Ciudad de Vitoria para hacerles "una oferta que no podrían rechazar". Sin embargo, la gerente Mila García de la Torre, la responsable de comunicación Cristina
La madre de Jorge Díez Elorza  (izqda.) y la viuda de Buesa, hace un mes.
Fernández, Eduardo Mateo y Pablo Bocca le dijeron que no. Las relaciones entre la Fundación y el Clan de Don Txarli son más que tensas. Una de las consecuencias de aquel intento de chantaje fue que en el homenaje a Fernando Buesa de este año, la convocatoria a los medios de comunicación no partía de la propia fundación, sino de las familias de Buesa y de su escolta, el ertzaina Jorge Díez Elorza, también asesinado por ETA en el mismo atentado.
     LOS EMPLEADOS DE LA FUNDACIÓN MARIO ONAINDÍA
      Txarli Prieto cree que el PSE de Álava es suyo. Él controla, él reparte los carnés de socialistas auténticos, él ignora al disidente, él logra subveniones y decide quién puede beneficiarse de ellas. Si Mario Onaindía levantase la cabeza y supiese que Txarli Prieto se cree el jefe de su Fundación, pediría la baja en el PSOE. La viuda de Onaindía, Esozi Leturiondo, encuadrada en el sector renovador de los socialistas alaveses, no entiende qué demonios pinta Prieto en una Fundación como la creada en torno a la memoria de
su marido. Txarli sí que lo sabe: quiere controlar, por ejemplo, cómo se gestionan los 15.000 euros que él consiguió de la Diputación Foral de Álava para la “Colaboración en Proyecto Intelectual y Político 2012”.
Txarli Prieto, ese líder carismático...
      Esta fundación se creó en 2009. Su problema de supervivencia parte de un hecho obvio: Onaindía no fue víctima del terrorismo. En su origen, para integrar en el PSE a los militantes de Euskadiko Ezkerra, los propios socialistas vascos le dieron una cantidad de dinero para ponerse en marcha. Cuando esos fondos se agotaron quedaban dos opciones: ser independiente o convertirse en una fundación del partido. De cara al exterior es autónoma, pero financiera e ideológicamente está controlada por el PSE de Txarli Prieto. El capo de los socialistas alaveses se ha convertido en una pieza clave de la Fundación cuando jamás simpatizó con Mario Onaindía ni con Euskadiko Ezkerra. En la pág. 201 del libro "Mario Onaindía. Jornadas de homenaje" editado por Zazpi Kultur Taldea, Prieto escribe: "¿Qué aportó EE a la izquierda en aquel tiempo? Pues una gran disgusto y una gran crisis profunda dentro del Partido Comunista de España, porque creo que creó un problema bastante trazado desde algunos años". Menos mal que era un libro de homenaje, que si no...

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