Vistas de página en total

domingo, 1 de julio de 2018

"EL QUIETO ESPLENDOR DE MIL SUEÑOS", LA MADRE DE TODOS LOS LIBROS DEL NOVELISTA CUBANO ROBERTO LASTRE.


Roberto Lastre ha parido su séptima novela. Asegura que es la madre de
todos sus libros. A sus 59 años, Lastre lleva casi toda la vida dedicado a la creación literaria. Es el fundador de la Editorial Arte Activo que ha publicado más de 120 títulos. Se estableció en Vitoria hace 20 años después de haber sido Fiscal Antidroga y Fiscal Anticorrupción en la Cuba de Castro, donde fundó el Instituto de Sociología Jurídica. 
¿Por qué dices que "El quieto esplendor de mil sueños" es la madre de todos tus libros?
Empecé a escribirla hace 15 años y de su tronco nacieron ramas en forma de otros libros. Así, “El quieto esplendor de mil sueños” segregó en 2010 un poemario que se llama “Vapor del vacío” porque notaba que en su primera redacción quedaba un poso poético que tenía que quitar de la novela. Después brotó otro libro, éste en forma de novela: “Muerto Vivace”. Tenía que sacar otras cosas de este libro que se me iban ocurriendo. Así nació una obra sobre la inmortalidad. Como iban brotando más ramas que impedían crecer al tronco con energía, incluso surgió en 2017 otro libro de poesía que titulé “Los Perros al Sol”. “El quieto esplendor de mil sueños” es como la madre, la Elegua, la madre prístina del mundo para la religión afrocubana de los yoruba.
¿De qué trata la novela? 
Empieza en Vitoria un día apocalíptico en que la ciudad se ha quedado sin agua, sin electricidad, sin comunicaciones... Una conspiración ha provocado que la ciudad se quede sin nada. Y ahí me pregunto: ¿Qué pasaría si te quitan el futuro? En Cuba nos da igual que nos quiten el futuro. Allí el futuro no es ni siquiera una ilusión, es algo que está ahí y que es probable que suceda. El narrador es un cubano que reside en Vitoria desde hace algunos años. Era abogado en Cuba y aquí trabaja de limpiador de escoria en los tornos y fresadoras. Se pasa todo el día recogiendo virutas de hierro. Es el camino de muchos emigrantes que vienen siendo licenciados, filósofos o psicólogos y terminan trabajando en una fábrica, en la urgencia de la vida. Todo empieza con una situación extraordinaria en Vitoria vista con los ojos de un cubano alucinado, delirante. La novela es más compleja de lo que se exige ahora en España, donde se pide una lectura fácil.
El proceso. Acotaciones temporales. Misión vital de RRL. Con él en la chepa desde
¿Cómo es posible que hayas cargado en la chepa con un proceso creativo que ha durado 15 años? Parece que esta obra tuya más que una novela es la misión de tu vida.
En el año 2003 empecé a escribirla durante unas vacaciones en Extremadura
con la pretensión de que fuera una novela infinita. Gran atrevimiento el mío viviendo en este mundo rápido donde todo tiene que ser veloz. En aquella época estaba centrado en mis estudios de la filosofía china. En La Habana teníamos siempre la referencia del Barrio Chino, que era algo interesante y hermético a la vez que servicial porque recurrías a él para usarlo. El Barrio Chino tenía un encanto raro que a mí se me quedó muy dentro. Yo crecí allí, en su entorno, porque viví en el Vedado y en Habana Vieja.
Sabemos que a lo largo de estos 15 años tu novela ha tenido tres títulos diferentes.
La primera escritura de este libro se llamaba "El Cielo Pasado", un concepto que utilizan los taoístas chinos para expresar ese estado en el que lo entiendes todo, de comprensión plena de la realidad. Está en "El Tratado de la Flor de Oro". También lo menciona Lao Tse en el "Tao Te Ching". Consiste en practicar el regreso al origen. El ser humano está tan contaminado por una sociedad en pleno proceso de depauperación, de deconstrucción moral que los chinos recomendaban desde hace más de veinte siglos volver al origen: reubicarte en el niño que eras. Por eso a Lao Tse le llamaban el niño eterno, el anciano niño. Pero no es que volvieras a la niñez de la tontería sino a convertirte en un niño encantado con el mundo, ese encantamiento que no hay que perder para ver la vida maravillosamente. Eso me lleva a mi estilo: buscar aquello real-maravilloso que hizo Carpentier. Es decir, si yo tengo que seguir siendo un ser encantado tengo que contarlo de una manera maravillosa.
¿Engordaba el libro página a página? Supongo que según iba creciendo también te veías obligado a podarlo, a trillarlo...
En 2007 le cambié el título según iba descubriendo cosas y lo llamé "La Conspiración de los Siglos". Me acuerdo que te di a ti un borrador de más de cien páginas y me dijiste "sigue por el río, no te vayas por los afluentes". El texto estaba amenazado por una cantidad de información increíble. Ahí fue cuando segregué. He quitado poesía, novela y otras cosas que se convirtieron en otros tres libros. Además, hay otra novela próxima que estoy escribiendo con Ramón Loza que también tuve que sacar de ahí. Es un proyecto sobre la historia de Álava.
Éste parece el libro de tu vida, el árbol primigenio del que salen todas las ramas de todas esas creaciones posteriores.
Este es el que ha parido todo lo demás. Y lo del árbol primigenio está muy bien. Se habla en el libro de ello. Lo decía incluso Mahoma que hay que recuperar el ser humano primigenio. Lo decían los chinos, casualmente lo dijo Mahoma también, a quien se lo habrá dicho el Arcángel San Gabriel (risas).
¿Cómo se convierte "La Conspiración de los Siglos" en "El quieto esplendor de mil sueños?
Ocurre cuando le acabo dando más importancia al protagonista. Elimino aquellos afluentes que han brotado del libro y me centro en un hombre que está amenazado de muerte en La Habana, lo van a matar, se sitúa en la situación límite entre la vida y la muerte por la cual recurre a la filosofía china. De ahí el título final de "El quieto esplendor de mil sueños".
En la novela conviven dos mundos, mis dos mundo: el de La Habana y Vitoria. 
Sabemos que acabas de releer tu novela antes de presentarla este próximo martes en la Casa de Cultura de Vitoria. ¿A qué autores te ha sonado tu libro? 
Mi estilo se emparenta con uno de mis padres literarios que es Alejo Carpentier, pero de paso también al realismo mágico de Gabriel García Márquez. Para describir la realidad e historia cubana he tenido que asumir esas dos influencias mágicas. También hay rescoldos de José Lezama Lima. Incluso resuenan los ecos de "El Tambor de Hojalata" de Gunther Grass para las escenas europeas de Vitoria. Con esto no quiero decir que les haya imitado pero uno no se puede desprender de sus padres literarios. Por cierto, mi vena más existencialista tiene que ver con Albert Camus.
En La habana hay un hombre amenazado de muerte, lo “matan” entre comillas y ahí hay una transofmraicón en su vida. Le mandan a Vitoria, al exilio de una manera ´fantásitca increíble, como la metáfora, la hpérbole, o el hiperbatón de los trabajos que ha pasado la gente de cuba para salir de ahí. Sale de forma tan incrible del país que será aluciante para el lector cómo puede salir de un país tan cerrado. En Vitoria tiene unos parientes
A ambos nos une nuestra condición de extrañados, de personas que "a falta de raíces tienen piernas", como decía Fernando Arrabal. Cuando te has desprendido del baldón de quitarte de encima la misión totémica de un libro con un recorrido de 15 años, ahora te enfrentas de nuevo al vapor del vacío... ¿Cómo lo vas a llenar? ¿Cómo afrontas el futuro? ¿Dónde te gustaría morirte? 
La verdad es que yo creo que no nos morimos. La muerte es una performance que hace la naturaleza con nosotros, nos cambia de cuerpo, nos muda, nos hace una transmutación en la que ya no importa ni existe el espacio. Entonces, en esa transmutación me da lo mismo morirme allí que aquí pero creo que me moriré aquí. Y no lo digo por un deseo temprano. 
Tras conseguir que tu factoría editorial Arte Activo haya publicado más de 120 libros que han realizado los sueños de unas 70 perosnas. Esos libros han sido también los meandros por los que se ha dispersado tu vida.
Estamos jugando aquí con modelos culturales diferentes. En otro contexto me valorarían mucho por el esfuerzo que hago sin ambiciones eco
nómicas para añadir libros a la realidad, para canalizar los libros de otros. Pero aquí el modelo es el del rico, el tipo que amasa una fortuna y después se descubre que lo ha conseguido explotando gente. Y a pesar de ello le celebran y le aplauden porque se ha hecho rico explotando personas. Y algunos lectores han venido a mí diciendo que no han visto el libro en El Corte Inglés o en Amazon. Pero señor: si está en todas las librerías ¿por qué tienes que ir a la Casa del Libro o a Amazon? ¿Por qué le vas a hacer más rico al rico? En vez de eso, cómprale a los libreros de Vitoria: a la Librería Mayner, a Ayala, A Anegón... Dejad de comprar en las grandes superficies para evitar seguir haciendo rico al más rico. Ése es el modelo cultural que hay en el mundo capitalista actual y ahí es donde yo veo que el mío no es el modelo ideal
Ya, pero si ahora viniese el diablo vestido con los ropajes de Planeta o Tusquets, y te quisiera comprar "El quieto esplendor de mil sueños" para darle un toque más comercial, ¿le venderías tu alma de novelista a a ese diablo editorial?.
A lo mejor con otra novela, pero con esta no. 
"EL QUIETO ESPLENDOR DE MIL SUEÑOS" se presenta este martes 3 de Julio a las 8 de la tarde con un "brindis báquico" en el RESTAURANTE IZAGA de VITORIA-GASTEIZ (C/ Beato Tomás de Zumárraga, 2). 


No hay comentarios: